Lugar incidental
“A veces hay que escoger bien
el adagio para ponerlo a prueba de incandescencias a la entrada o no se te
permitirá ingresar” Mustafa Abdul Jalil III. ‘El Ufanalgarafanto’
Usé prenda del lugar y se me
antojó una bebida mientras esperaba algo de flujo peatonal. Aunque se me olvidó
un requisito: encomendarme a algún santo particular; las gentes, por la
Suciedad suelen hacerlo y es un acto de relaciones públicas interesante e inherente
al comportamiento que genera la sinergia por la actividad estatal. Mientras
llevo medio vaso de jugo tropical de la región me voy enterando del resto. Es
muy parecido de donde vengo. El sistema de transporte, las calles y
direcciones, demografía, anglicismos, hasta trivialidades varias. Sin darme
cuenta ya parezco uno de ellos.
En la hora que hay tráfico se
exhiben los delirios del sector provocándome una ansiedad de socializar con mi
cuarto vaso de jugo tropical casi bebido. Hace una sed desesperante y el único
que consume líquido soy yo. Los demás pasan, preguntan una dirección, fuman un
cigarrillo, hacen una llamada y algunos cobran. De repente algo no es usual;
una señora con un trasero enorme para un taxi (también amarillos), se sube
gateando y se acuesta de culo para arriba. Unas niñas con ropas arañadas salen
de la esquina de al frente pelándose lo que parece una caja de icopor con
comida china. Digo que es china por los diseños de la cajita y además porque la
semana pasada cuando llegué a este lugar escuché por la radio que un comité
enviado por Salud Pública al un vecindario quejarse de un almizcle extraño,
encontró irregularidades en los ingredientes usados en “La Mesita de Mao Tse”.
Restaurante. Tuvieron que usar tapabocas la operación encontró rollitos de
dermis curada en orines de diabético y
la conducta de los comensales al degustar el plato de la casa era similar al de
esas infantes haraposas.
“Escucha la propuesta son
ciento treinta” una voz adentro me suena. “Déjate invitar”. Parece loco pero
pensándolo bien son otras políticas y de alguna manera si no regreso no lo
notarán. El departamento de Inmigración es más laxo aquí y no es porque sean
corruptos sino porque no les interesa deportar. Mezclar es la consigna. ¡Parchate
un Jack!
Como toda nación tienen su fe
y sus tres aparatos, designios divinos adjudicados a todas las razas, criaturas
o cualquier tipo de naturaleza biótica o abiótica en una fecha Eónica-orgónica
tomándola como mínima referencia si es el caso. Estampitas de un sujeto llamado
Divino Niño, calcomanías de una Virgen anillada en bolitas adheridas a los
vehículos puedo notarlas en la bandera si me acerco a ella. Aquí todo es
emprendimiento. La lógica pura para evitar las ambivalencias cognitivas y
morales. Tengo tanta caspa en la cabeza que trato de justificar lo que veo pero
ellos son legítimos, genuinos y actúan como si fuese un principio y no
prioridad la dinámica de su sistema. El aborto es legal, la maricada igual y la
locura es una actitud siempre y cuando las dos primeras se justifiquen en la
Oficina de Reclamos Indulgentes (ORI), dependencias para ufanalgarafantes. Los
extranjeros como yo que dejan de serlo cuando deciden quedarse, se adaptan de
una manera increíble. Dice en la entrada: “¡Vernáculia! Si usted está de
arribada procure agasajarse sin interrumpir el proceso”. Entiendo. La gente se
expresa de una manera económica usando frases de reciclaje ya listas para
obsequiarse. Un matón en una conversación con otro particular le compartía: “si
tu negocio es la venta de accesorios para el hogar es natural que todo se mueva
alrededor de mesitas, tapeticos, esencias, etc. y vos, consiente que en
ocasiones te roben, no te vaya bien en las ventas, tu mujer se vaya con otro o
tu hijo se vuelva lesbiana no habiendo cometido ningún crimen, quiera decir que
no lo estés haciendo bien. Así mismo ocurre si tu negocio es asesinar gente. Lo
común es que vivas rodeado de muerte, sangre, deditos sueltos, etc. y no es que
uno viva en una mala racha o sean castigos divinos o maldiciones eternas.
Simplemente es el medio y es apenas obvio que si te mueves en tal o cual
actividad comercial las situaciones sean las más coherentes con la labor que
ejerzas. ¿No te parece?”
El control de natalidad no
importa. “Mezclar y Poblar”. Lo tendré presente. Siempre pensé que nunca iba a
tener hijos pero quedándome en este sitio podría reproducirme en masa hasta con
animales. Vernáculia es bipolar. La gobiernan todos a través de un Sistema de
Redes transmitida por medio de dispositivos móviles y por cada “De acuerdo” se
reúne una delegación para hacer actas y compendios sobre las tendencias en
materia ambiental-político-vacacional-cultural-social.
Parece haber transcurrido el
tiempo. Veo mi reloj y no ha pasado más de una hora menos cinco minutos GMT.
Siempre he atrasado mi reloj cinco rayas. Quizá a eso se deba mi incumplimiento.
Un señor de edad se baja los
pantalones y se caga debajo de un árbol con una frescura representante y un
hombre de traje me hace un presente: “¿Qué tal este bouquet-sito? Dice y se sube a su
Chevrolet Cruze plata. Dos mujeres hablando una lengua incomprensible dejan un
folleto con caricaturas en la portada. La hojeo y es un comic donde un león
come manzanas con una cebra roncante a su lado. Un gramófono en perfecto estado
lo coloca en el andén un ciudadano para acomodarle la aguja y alcanzo a leer
“Buena Vista Social Club Vol. 1”. Bello. Me tomo otro jugo y busco un árbol
para mear.
Mi vuelo es dentro de cuarenta
minutos y este lugar es un embrujo. Pero necesito salir. “Salir es fácil;
respete la fila”. Grita una fémina en medio de gentes. Antes una llamada para
motivarme. Hay mucho talento por estos días que llevo y pienso en coger alguna
nobleza de estas que se tallan. Los ufanalgarafantes de Vernáculia son de mucha
actividad. Espero volver con algo de dinero para ufanalgarafarme y suavizarme
las vergüenzas. De entrada por salida para radicarme después.
“Deceso de pasajeros.
Siguiente parada, Fundación Humana”. Ese lulo enrarecido que se da en este trópico me está dejando
ciego. “Deje su mensaje después del tono”: Para algarafarria y orquesta mis
grandes rebotes. Mensajes detesto.
A la orden,
Regulador.